lunes, 29 de octubre de 2007

elecciones 2007.




Ayer fueron las elecciones en argentina.
A pesar de la crisis del sistema, me parece bueno que al menos uno pueda votar y elegir quién cree que tiene que gobernar.
No creo que en nuestra tierra exista una democracia verdadera. Para nada.
Y que la gente vaya a votar es de las pocas cosas que no pueden evitar, aunque lamentablemente sí ensuciar y manipular, los nefastos dirigentes.
Porque si no nos dejaran votar ya sería muy poco disimulado el abuso a nuestros derechos.

La cosa es que fui temprano y me metí al cuarto oscuro, que en realidad es un aula de un colegio. Cómo será de horrible la política que cuando al aula de una escuela (lugar esperanzador si es que existen) le ponen esos papeles cortos y anchos con nombres y caras de políticos, pasa a llamarse “cuarto oscuro”.

Con cierta contradicción al párrafo inicial, voté al oficialismo. Es decir a cristina Fernández.

Aunque al 99% de mi entorno le irrite mi voto y al 1% restante sólo le moleste, a mí me parece la mejor opción de las que había. No se enojen, loco. Yo pienso así.
Lo hubiese votado a pino solanas, pero estuvo muy cerca de luis juez hace poco y luis juez me parece lo más perverso que he visto en política, junto a ese que fue presidente 10 años.

El gobierno de kirchner me pareció el mejor, o el menos peor, que me tocó vivir en mis 27 años de vida. Y si contamos que nací en la dictadura, y que antes de la dictadura estuvo isabel con el brujo, creo que el gobierno actual fue el mejor desde hace muchísimo tiempo.

Lo voté principalmente por su política de derechos humanos, por su parada de carro a los periodistas (y mayoría del establishment) y porque hace bastante que no escucho la palabra FMI.

Quizás me conformó porque yo espero muy poco de los gobiernos.
Sí espero mucho más de la gente común y debo admitir que muchas veces me sorprende para bien y muchas otras para mal.

Me pareció muy positivo que las dos candidatas principales hayas sido mujeres. Está bueno eso. Nos hace un poco menos primitivos.

Como negativo destaco la intolerancia y el terrible gorilismo de muchos de ustedes, mi querido entorno. Veo que muchos expresan bronca por el mero hecho de “son peronistas”.
Algunos creen que el voto de ustedes es mucho más pensado que el voto de los sectores más bajos. No cabe ninguna duda sobre la influencia del aparato en la clase popular. Pero no se crean que el aparato mueve a 15 millones de personas. Hay mucha gente humilde que vota al peronismo por convicción y parece que a muchos les duele que el voto de la gente pobre valga uno, igual que el de ustedes que se creen mejor capacitados para entender la realidad.

Muchos se disfrazan de personas que tienen en cuenta a los pobres. Pero sólo para darles una moneda o una fruta si pasan pidiendo por la puerta de tu casa. Pero no les gusta mucho que se expresen y que participen. Y muchísimo menos que ganen.

Veo bastante irresponsabilidad, he escuchado a muy pocos que me han dado motivos certeros para cuestionar mi voto. Creo que sólo fulano y el mati.

El resto, se muere de bronca cuando la ve festejar a la que ganó, pero no se preocupa mucho por informarse y menos aún por hacer algo desde el lugar que ocupa. Esto no es gran hermano, me parece.

Es sólo mi opinión. Como lo hice ayer metiendo un voto en una urna.
Creo que tengo derecho.
Así como vos tenés el derecho que estás ejerciendo en este mismo momento:
El de fastidiarte conmigo.