martes, 6 de noviembre de 2007

el asadito.


No podemos vivir sin las minas, no podemos vivir con las minas, ¿cómo se zafa de eso?
Las mujeres son las que matan la ilusión, ésa es su función. Estaría mucho más tranquilo sin ellas. Acá hay una calma chicha porque no hay minas; si viene una, se pudre todo.
En materia de mujeres, quien no sea pesimista es un necio.
Es así, gordo, las mujeres no entienden nada y nosotros somos unos boludos esperando que la cosa cambie.
Ellas viven más que los hombres porque tienen menos ideales, pero igual rompen las pelotas todo el día...
chau, muchachos... chau.
el asadito / gustavo postiglione.

2 comentarios:

fulano/martínvillarroel dijo...

mujeres: principio y solución de todos nuestros problemas

sensemina dijo...

Como toda persona que se considera parcial frente a ciertos temas, voy a salir en MI defensa (que el resto se arregle como pueda).
La función de las mujeres supera ampliamente la de matar la ilusión. Por el contrario, la alimentamos día a día, para que después, con el paso de los segundos, la ilusión decida suicidarse debido al caos producido en la vida de los protagonistas. Como una saturación de emociones que nadie -NADIE- (ni siquiera nosotras) llega a comprender. Ante tanta conmoción, pues claro, la muerte es mejor opción. Y ahi yacen las esperenzas del amante empedernido.
Los ideales... ay, los ideales. No seré mujer según este criterio entonces. Me considero tan idealista que a veces creo que al pisar tierra moriría expulsada por los gases atomosfericos. Esos de la capa de ozono, viste. Por ende voy a vivir menos que el resto de las minas. No me preocupa, ni me ocupa.
Rompo las pelotas, si, debo admitirlo. Y mucho. Pero también me gusta que me rompan los ovarios. Por ende, + con - es 0. Aunque tengo la extraña capacidad de acercarme a toda clase de boludos que no tienen ninguna intención ni de romperme las pelotas. No sé. Caso curioso. A nadie lo deja bien el bondi. Menos en esta ciudad juecista.
De las minas no se zafa amigos. Como nosotras no podemos zafar de ustedes, hermanos. Por suerte! Yo no sé qué haría. Me volvería autista. Si, capaz. Esa me gusta. El autismo como solución superadora de las relaciones amorosas. Ea ea! Ea...